Última enseñanza: Matot Masei
5777 (2017)
Ajarei Kedoshim Balak Beahaloteja Behar Bejukotai Beshalaj Beshalaj Emor Itro Jukat Ki Tisa Koraj Matot Masei Mishpatim Pinjas Sangre, vida y muerte Shavuot Shemini Shemot Shlaj Tazría – Metzorá Tetzavé Truma Vaerá Vaiakhel-Pekudei Vaieji Vaieji Vaigash
5776 (2016)
Balak Behalotja Bereshit Devarim Ekev Especial Iom Kipur y Sucot Jaie Sara Jukat Ki Tavo Ki Tetze Koraj Lej Leja Matot-Masei Miketz Nitzavim Noaj Ree Shelaj Leja? Shoftim Toldot Vaetjanan Vaierá Vaieshev Vaietze Vaishlaj
5774 (2014)
Balak Behar Beshalaj Devarim Ekev Itró Jukat Ki tavo Ki Tetze? Koraj Masei Matot Mishpatim Nitzavim – Vaielej Noaj Parashá Bejukotai Pekudei Pinjas Ree Shoftim Tetzavé Truma Tzav Vaetjanan Vaiakel Vaikra
5773 (2013)
Ajarei Kedoshim Balak Behalotjá Behar – Bejukotai Beshalaj Bó Devarim Ekev El mayor milagro de todos Emor Iom Kipur y Sucot Itro Jaie Sará Jukat Ki Tavo Ki Tetzé La caída de un mito Lej Lejá Matot – Masei Miketz Mishpatim Nitzavím – Vaielej Noaj Parasha Koraj Pesaj 5773 Pinjas Ree Shavuot Shelaj lejá Shemot Tazría – Metzorá Tetzavé Toldot Trumá Vaerá Vaerá Vaetjanan Vaiakel – Pekudei Vaiejí Vaierá Vaieshev Vaikra Vaishlaj Vaitzé
5772 (2012)
Balak Behalotjá Behar-Bejukotai Bereshit Beshalaj Bó Devarim Ekev Emor Itró Jaiei Sara Jukat Ki Tavó Ki Tetzé Ki tisá Koraj Las Diez Plagas Previas a La Libertad Lej Lejá Matot-Masei Miketz Mishpatim Nasó Nitzavim Noaj Pinjas Ree Shelaj Shemini Shemot Shemot Shemot Shoftim Tazría – Metzorá Tetzavé Tishrei 5773 Toldot Trumá Tzav Vaerá Vaerá – “Polémica en Egipto entre los bastones y las serpientes” Vaetjanan Vaiakel – Pekudei Vaierá Vaigash Vaikra Vaishlaj
5771 (2011)
Bamidbar Behalotjá Behar Bejokotai Beshalaj Bó Devarim Ekev Emor Itró Jaie Sara Jukat Kedoshim Ki Tavó Ki Tetze Ki Tisá Koraj Lej Lejá Masei Matot Metzora Miketz Mishpatim Noaj Parshat Nitzavim-Vaielej Pekudei Pesaj Pinjas Reé Shavuot Shelaj Sheminí Shoftim Tazría Tetzavé Toldot Truma Tzav Vaetjanan Vaiakel Vaiejí Vaierá Vaieshev Vaieshev Vaietzé Vaigash Vaikra
5770 (2010)
Ki Tetzé Ekev Iom Kipur – Sucot 5771 Jaie Sará Jukat Ki Tavó La Redención en marcha Lej-Lejá Miketz Nitzavim-Vaielej-Hazinu Noaj Reé Shemot Shoftim Toldot Vaerá Vaiejí Vaierá Vaieshev Vaietzé Vaigash Vaishlaj
Pinjas
16 de Julio de 2017
Resumen de la parashá
Como recompensa por el celo puesto en la defensa del honor de Hashem, Pinjas recibió la promesa de que el sacerdocio sería retenida por sus descendientes. Se dictaminó que si una persona no dejaba hijos, sus hijas tenían derecho a la herencia. Además, si alguien moría sin dejar descendencia, su propiedad pasaría a sus hermanos sobrevivientes o, si no los había, a su pariente más cercano. De este modo se estableció el principio de que el título sobre la tierra debía permanecer dentro de la familia. Hashem ordenó a Moshé que ascendiera a la montaña de Avarim desde donde podía ver la Tierra Prometida. Sabiendo que estaba próximo el fin de sus días, Moshé manifestó preocupación por el bienestar del pueblo en el futuro y solicitó que fuera nombrado su sucesor. Di-s respondió que Iehoshúa Bin Nun asumiría el liderazgo. Moshé debía colocar sus manos sobre él para simbolizar la transferencia de autoridad.
¿TRES SEMANAS ES POCO?
Tres semanas es mucho tiempo cuando esperas un e-mail. Pero toma todo el dolor, tormento, pecados y sufrimientos de una nación de 4.000 años y aprésalos en un espacio de tres semanas… y tres semanas son un espacio muy estrecho. Los eventos de dos días terribles en nuestros años de formación encapsulan un gran pedazo de nuestra historia y marcan la trayectoria de nuestro recorrido en el próximo milenio. ¿Cuáles son estos dos días, y qué sucedió?
El 17 de Tamuz
El día 17 del mes de hebreo Tamuz, del año 2448 desde la Creación (1313 AEC), cuarenta días desde el Recibimiento de la Torá en el Monte Sinai, Moshé descendió de la montaña, y se encontró con que los Hijos de Israel estaban adorando a un becerro de oro. En sus manos, llevaba las Tablas de la Ley, inscriptas en ellas los Diez Mandamientos. Al ver la traición del pueblo al nuevo pacto con Di-s, Moshé “tiró las Tablas de sus manos y las rompió bajo la montaña”.
Di-s perdonó a Su pueblo, pero también dijo: “En el día de Mi contabilidad, Lo contaré”. Nuestros Sabios explican: cada pecado de la historia judía contiene un poco del pecado del becerro de oro; cada catástrofe de la historia Judía contiene algo de la catástrofe de la partición de las Tablas.
El 9 de Av
Era un pueblo herido, pero en estado de recuperación para volver a seguir su trayectoria hasta la Tierra Prometida. Y luego, en la víspera del día nueve del mes de Av, un año y tres semanas después de la rotura de las Tablas, la travesía de Israel se detuvo en seco.
Fue en esta trágica noche que nuestros ancestros, desanimados por el reporte negativo traído por los espías, perdieron la fe en la Divina promesa de la Tierra. Al final, Moshé aseguró el perdón de Di-s y reanudaron viaje, pero la naturaleza de la travesía fue alterada. Moshé y toda la generación que habían dejado Egipto y presenciaron la entrega de la Torá en el Sinai, murieron en el desierto. Sus hijos anduvieron en el desierto durante 40 años, marcando un patrón que se repetiría en los futuros exilios de Israel.
Las tres semanas
Cerca de 1.400 años más tarde, estos dos días de traición y desesperación otra vez dejaron su marca en la historia Judía, remarcando las“tres semanas” en las que se vio la destrucción de Jerusalem y su Templo Sagrado y el comienzo de nuestro más reciente, más largo y amargo Galut (exilio).
El 17 de Tamuz del año 3829 desde la Creación (69 EC), el ejército Romano que sitiaba Jerusalém, irrumpió en la ciudad destruyendo las murallas. Durante tres semanas las batallas arrasaron las calles, hasta que toda la ciudad fue destruida y el Templo Sagrado, el corazón de la ciudad y del pueblo Judío, ardió en llamas el 9 de Av. Otras numerosas tragedias en la historia Judía, (tanto antes como después de la destrucción del Templo), ocurrieron el 17 de Tamuz y el 9 de Av, y durante las tres semanas que hay entre estas dos fechas. Hasta el día de hoy, estos dos días son días de ayuno, y las “Tres semanas” marcan un período de duelo y arrepentimiento.
Despegando
¿Qué sucede cuando tanto caos es comprimido en un espacio tan estrecho?
Pregúntale a un jardinero qué sucede cuando pellizcas una manguera de jardín. Pregúntale a un ingeniero de láser qué sucede cuando un haz de luz es enfocado en un punto en particular. Pregúntale a un historiador qué sucede cuando las pasiones reprimidas de una persona se canalizan a través de un líder carismático.
Pregúntale a nuestros Sabios: te dirán que el Mashiaj nació el 9 de Av. Te dirán que es la tarea de nuestra generación apretar cuatro mil años de anhelo y esfuerzo en la estrecha recta del Galut y llevar nuestro mundo a una órbita más alta: a un estado de bondad Divina y perfección prometida por los profetas de Israel.

¿Qué Aprendemos esta Semana de la Parshá?
La llave está en nuestras manos
“He aquí Le hago entrega de Mi pacto de paz”…(Bamidbar 25:12)
En el comienzo del párrafo semanal de la Torá, se nos relata sobre la recompensa conferida a Pinjas, quien “quitó Mi furia de los hijos de Israel, al celar Mi celo en su seno”. Pinjas vio el peligro que se cernía sobre el Pueblo Judío, como consecuencia de la brecha infligida a la muralla que separaba a los iehudim de las demás naciones, a través del pecado con las hijas de Midián. Ello llevó a Pinjas, a pesar de ser cohen, un hombre de benevolencia, y nieto de Aarón, quien era “amante de la paz y perseguidor de la paz”, a realizar la drástica acción de matar a Zimrí y a la mujer midianita con la que pecó.
INSTALÓ LA PAZ
La parshá de Pinjas se lee durante las semanas de “Bein Hametzarim”, de semi-duelo para el pueblo judío. Hay una profunda relación entre ambos. El exilio y la destrucción también comenzaron con una “brecha” causada en la muralla de Israel, la que separaba entre ellos y las demás naciones- en lo que hace al sistema de vida, conductas, valores de la Torá, que fueron invadidos por conductas ajenas al espíritu y la letra del judaísmo. Los días de duelo comienzan el 17 de Tamuz cuando fue “quebrada (la muralla de) la ciudad” y de esa brecha se llegó a la destrucción y el exilio.
A su vez, de la misma manera que Pinjas logró exitosamente reinstaurar la paz entre Di-s y el pueblo judío, incluso habiendo estallado ya el pecado de las mujeres de Midián, así también se nos ha dado las fuerzas y aptitudes para alcanzar la verdadera paz y revelar la redención mesiánica, que se encuentra oculta justamente en el mismo seno de los sucesos de la destrucción.
BIENESTAR CELESTIAL
Los días de las calamidades y destrucción, contienen en su interior la Luz de la Redención. Por fuera se ven como días duros, dolorosos, días en los cuales sucedieron los episodios de exilio, pero en su dimensión más profunda se oculta en ellos un nivel de bondad superior. El exilio y la destrucción, al fin y al cabo, provienen de Di-s, Quien es la “Esencia de la Bondad”, y a su vez está en la naturaleza del bien beneficiar a los otros. Eso mismo nos lleva a la conclusión, que también en los sucesos aciagos se esconde un bien, un bien verdadero, un bien celestial.
La bondad oculta en el exilio del Galut es la misma redención, Gueulá. Cuando llegue la redención mesiánica se revelará una bondad tan grande y elevada, que entenderemos y reconoceremos que por ella valió la pena sufrir el dolor del exilio y la destrucción. Esta bondad superna se gestó y formó en las esferas celestiales desde el mismo instante en que comenzó la destrucción, pero permaneció “arriba” y no pudo descender y revelarse abiertamente en este mundo, puesto que la realidad terrenal no estaba madura para asimilar un nivel de bondad como esta.
LA REDENCIÓN ESTÁ EN NUESTRAS MANOS
Esta es la causa por la cual estos días de Bein Hametzarim son llamados como las “tres semanas” y no los “21 días”. Con esto queremos resaltar el número “tres”, que alude al Tercer Templo de Jerusalem, es decir, la redención oculta en los días de la destrucción.
La redención está en nuestras manos. Esto es como un tesoro de piedras preciosas y diamantes que se encuentra encerrado en una caja, y la llave de la misma ha sido puesta en nuestro poder. Se le dio a cada judío la capacidad de “girar la llave” y revelar los tesoros escondidos en el exilio. Esto se logra a través de cerrar la brecha espiritual de la muralla quebrada, y a través de aumentar en Torá y santidad. Y es la manera de hacerse acreedor de la revelación de la extraordinaria bondad de la redención, pronto realmente.
Sefer Hasijot 5748, Tomo 2 Pág. 539

Me parecerán juegos de niños
El hijo del famoso graff Pototzki de Lituania se convirtió al judaísmo. Cuando su padre se enteró, lo persiguió por mucho tiempo hasta que finalmente fue apresado. La Iglesia lo juzgó y lo condenó a muerte. Sin embargo sus verdugos, que le tenían admiración y aprecio, le pidieron que cuando se encontrara en el Mundo de la Verdad no se vengara de ellos por ejecutarlo. Éste les respondió con un ejemplo: “En su infancia, un príncipe jugaba con el hijo de uno de los ministros. Cierta vez su compañero le derribó una torre de cubos. El príncipe se enojó terriblemente y decidió en su fuero íntimo que, al ser mayor y convertirse en rey se vengaría de su amigo, por haberle tumbado los cubos. Se entiende que cuando fue coronado, los juegos infantiles ya no ocupaban lugar en su mente adulta. De la misma forma- dijo el hijo del graff- cuando llegue al Mundo de la Verdad, todos los temas mundanos me parecerán juegos de niños”.

BEN HAMETZARIM -“ESPERANDO AL MASHIAJ”
Estas tres semanas que van del 17 de Tamuz (11/7) hasta el 9 de Av (1/8), son tres semanas en las que nos encontramos de duelo por la destrucción del Beit HaMikdash que culminó con el exilio del pueblo de Israel. Es muy importante reflexionar sobre esta situación (el exilio) y pedir de Hashem que nos mande al Mashíaj. Tal como ocurriese en el primer exilio en Egipto, Hashem no mandó al salvador (Moshé Rabenu) hasta que el pueblo mismo clamó por la salvación, como está escrito en (Shemot 2:23 y 24). Por este motivo nos enseñaron que en la Amidá pidamos por la venida del Mashíaj “Haz sonar el gran shofar para nuestra libertad… y recógenos de los cuatro rincones del mundo a nuestra tierra…” “Regresa con misericordia a Jerusalem, Tu ciudad… y reconstrúyela pronto en nuestros días…” “Haz que el vástago de David, Tu servidor florezca rápi-damente, e incrementa su poder mediante Tu salvación, pues a tu salvación ansiamos todo el día…” “Que nuestros ojos vean Tu retorno a Tzión…” y concluimos con “sea Tu voluntad… que se reconstruya el Bet Hamikdash pronto en nuestros días”. En el día 9 de Av los Sabios instituyeron una plegaria adicional en el rezo de minjá que dice: “Consuela Hashem a quien está de duelo por Tzión y Jerusalem… Por eso Tzion llora amargamente y Jerusalem eleva su voz: ¡Oh mi corazón, mi corazón se quebranta por sus acecinados! … Pues Tu Hashem, la consumiste con fuego y con fuego Tu has de reconstruirla, como fue dicho: Yo seré para ella dice Hashem, un muro de fuego de rededor y Yo seré para gloria en su medio (Zejaria 2:9)” Aunque nuestros Sabios nos cuentan que el tercer Bet HaMikdash será construido por Hashem como decimos en los rezos: “… el Santuario, Hashem, que Tus manos han establecido” (Shemot 15:17) No obstante también será determinante la participación del hombre. Llamado del Rebe de Lubavitch En estos días es menester incrementar la observancia del versículo “Tzión será redimida con Ley (mishpat), y quienes retornen a ella lo harán mediante la caridad (tzedaká)”, ampliando nuestros actos de caridad y estudio de la Torá. Es particularmente importante dedicarse a aquellos segmentos de la Torá que tratan de la Redención y la construcción del Gran Templo, mediante lo cual “Yo -dice Di-s- se lo consideraré como si estuvieran abocados a la construcción del Templo”. El estudio de estos temas debe ser, en nuestros días, con mayor entusiasmo, dado que nos encontramos en los umbrales de la perfecta y genuina Redención, por lo que es importante estudiar los temas vinculados al Gran Templo, que pronto será una realidad palpable, con la venida de nuestro justo Mashíaj.

LA NOTA
El Muro Occidental, el Kotel, es el remanente de los grandes muros que rodeaban el Templo Sagrado. Cuando el Templo fue destruido, Di-s juró que esta parte permanecería para siempre.
El gran tzadik, Rabí Jaim ben Atar, conocido como Ohr Hajaim (HaKadosh), tuvo muchos estudiantes notables. Uno de ellos era Rabi Jaim Iosef David Azulai, conocido por el acrónimo de su nombre, el Jida.
Cuando éste viajó a Israel, su maestro le dio, como es la costumbre, una nota para insertar entre las piedras del Kotel. El Jida tomó la nota, la puso en un lugar seguro y pensó llevarla tan pronto como llegara a Tierra Santa.
Cuando arribó, el Jida decidió no depender de la caridad y trabajar con el sudor de su frente. Para implementar su plan, compró un burro y un carro y se puso a ganar su escaso sustento transportando arcilla. Vivió así durante los primeros años. Entonces, de repente su burro murió, dejándolo sin trabajo. El Jida se sintió aplastado por el imprevisto, y como la Torá nos enseña, buscó en sus acciones tratando de descubrir la razón de su sufrimiento. Entonces se dio cuenta: ¡la nota! Lo había olvidado. El Jida primero se sumergió en una mikve. Buscó el papel que el Ohr HaJaim había escrito, y corrió al Kotel. Una vez allí, lo insertó, sin leer, en las profundas hendiduras de las antiguas piedras. Se sumergió en la oración, pidiendo perdón a su maestro. Sintiéndose muy aliviado, volvió a su lugar habitual en la sala de estudio. Pero algo era diferente. La gente lo miraba distinto y lo trataba con gran deferencia y temor, como si fuera un personaje notable. -¿Qué ha ocurrido? -les preguntó.
Pero la gente no podía explicar qué era lo que provocaba su reacción. -Quizá puedas decirnos qué es diferente en ti -respondieron. El Jida les habló de su desgracia, que consideraba un castigo por su olvido de la nota durante tanto tiempo.
Les explicó que hoy había completado su tarea y había obedecido al Ohr HaJaim colocando la nota en las piedras del Kotel. Cuando los estudiosos y los jefes de la comunidad escucharon la historia, tuvieron mucha curiosidad por saber lo que estaba escrito en la nota.
Invocando toda su autoridad, imploraron al Jida que les mostrara dónde la había colocado. Los llevó al lugar exacto en el Kotel.
La sacaron y la abrieron. El mensaje decía: “Mi hermana, mi novia [referencias místicas a la Divina Presencia que descansa en el Kotel] te suplico que ayudes a mi amado estudiante en su momento de necesidad”. Cuando la historia se extendió en Jerusalém, el pueblo comprendió la grandeza del Jida y fue nombrado Rabino Supremo de la Ciudad Santa.

Pinjas se identifica con el profeta Eliahu quien anunciará la venida del Mashíaj. La porción de Torá de Pinjas comienza con la declaración de Di-s: “He aquí, Yo le concedo mi pacto de paz”. Esta es la misión de Eliahu, establecer la paz entre el pueblo judío como el profeta Malaji relata, “He aquí, Yo te enviaré a Eliahu, el profeta, que volverá el corazón de los padres a sus hijos y el corazón de los hijos a sus padres”. Este énfasis en la paz anulará la causa del exilio, el odio injustificado. Cuando la causa del exilio sea anulada, el exilio mismo cesará. (El Rebe, 21 Tamuz, 1990)
Highlights de la semana
* El 18 de Tamuz, Moshé destruyó el becerro de oro.
* El 19 de Tamuz Moshé ascendió por segunda vez al Monte Sinai, y permaneció allí otros 40 días. Aclaramos que Moshé ascendió en 3 oportunidades al Sinai.
* El 22 de Tamuz de 1570, falleció el famoso cabalista, Rabí Moshé Cordovero, autor del Pardes Rimonim, y está enterrado en el cementerio antiguo de Tzfat- Israel.